El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) está considerado como un trastorno de ansiedad cuyo síntomas nucleares son los pensamientos repetitivos que causan angustia, las obsesiones, y los rituales que se realizan con el fin de mitigar dicha angustia o compulsiones. En el TOC, el pensamiento repetitivo se suele sentir como parasitario o ajeno y el enfermo es totalmente consciente de él. La compulsión del TOC se diferencia de otro tipo de compulsiones como beber o comer, porque se realiza con el fin de mitigar la angustia que provoca el pensamiento y como algo forzoso que no se puede dejar de hacer y no como un acto que provoca satisfacción en sí mismo.
Etiología del trastorno obsesivo compulsivo
Se considera un trastorno de origen multifactorial. Por un lado habría un factor de heredabilidad familiar, ya que en estudios realizados en gemelos que portan la misma carga genética, gemelos monocigóticos, la concordancia es mucho mayor que entre hermanos que comparten el 50% de genes. Por otra parte la educación de los padres, extremadamente exigentes o protectores, podría influir en el grado de inseguridad y ansiedad que la persona desarrolla desde la infancia y por ende en el pronostico del trastorno. Respecto al factor ambiente, vivir situaciones estresantes como acoso en la infancia o adolescencia, puede aumentar los síntomas del trastorno.
En definitiva, el paciente hereda cierta vulnerabilidad neurobiológica. Dicha vulnerabilidad puede ser exacerbada por un estilo determinado de crianza y por unas experiencias tempranas estresantes, determinando todo ello el grado de severidad de los síntomas.
Trastorno obsesivo compulsivo, origen neurobiológico
El hecho de que las compulsiones giren en gran parte sobre conductas de limpieza por miedo a la contaminación, de seguridad o comprobación, ha hecho que surjan explicaciones etológicas, es decir con base en el comportamiento humano y animal. Estas teorías encontrarían un nexo entre las conductas de acicalamiento animal y las compulsiones de limpieza. La conducta de acicalamiento no solo tiene como objetivo la higiene y con ello la salud y supervivencia. En algunas ocasiones dicha conducta aumenta con el estrés o la ansiedad.
Los compartimientos que responden a patrones fijos de actuación, el equivalente a la conducta de acicalamiento animal, en el ser humano se encuentran en los ganglios basales.
Estos responderían ante un estímulo, como la suciedad por ejemplo, con una acción, lavarse las manos. Señales sensoriales de origen cortical detendrían la acción una vez que la sensación de suciedad desaparece.
Los últimos estudios de neuroimagen señalan los ganglios basales, el cíngulo anterior y la corteza orbitofrontal izquierda como las estructuras implicadas en el trastorno obsesivo compulsivo. Encontrando en estas zonas un nivel de actividad mayor que en los grupos de control.
Tratamiento del trastorno obsesivo compulsivo
Los tratamientos más empleados hasta ahora se basaban en:
- Intervención farmacológica, con inhibidores de la recaptación de la serotonina.
- Intervención cognitivo conductual, mediante técnicas de exposición con prevención de respuesta.
Actualmente existen varios estudios que prueban la eficacia de la estimulación transcraneal con corriente directa, tDCS, para inhibir la actividad del circuito implicado en el trastorno obsesivo compulsivo.
La tDCS y el neurofeedback nos proporciona una herramienta para atenuar la excitabilidad cortical teniendo en cuenta la neuroanatomía del trastorno y de esta manera conseguir una neuromodulación más funcional, no invasiva y sin efectos secundarios para las personas que padecen la enfermedad.
Los patrones eléctricos en el trastorno obsesivo compulsivo
La realización de un Qeeg nos puede indicar las zonas de mayor activación para poder utilizarlas como diana en el tratamiento, tanto con neurofeedback como con tDCS.
En este caso podemos ver como las zonas que corresponden a las posiciones CZ , FZ y Fp1 tienen un nivel de actividad por encima de la norma. Dichas zonas corresponden con el circuito afectado en el trastorno obsesivo compulsivo.
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